Por Daniel Ramos
Bacalar, 03 de febrero.- A pesar que el municipio de Bacalar no cuenta con un rastro o punto de sacrifico común, donde se puedan regular las medidas de higiene con la que se trata la carne, autoridades de salud descartan que los más de 10 mil habitantes pudieran contraer alguna enfermedad.
En la cabecera municipal se sacrifican diariamente un promedio de 30 cerdos y tres reses para el consumo de más de 10 mil habitantes. En este sentido autoridades sanitarias descartaron que los consumidores pudieran adquirir alguna enfermedad derivada del consumo de la carne de cerdo, pues los animales que se sacrifican en el estado son de granjas debidamente supervisadas.
El responsable del proyecto de rastros de la Cofepris (Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios), Carmen Barrón Perez, indicó que los municipios de Bacalar y Tulum, son los únicos en el estado que no cuentan con rastros para el sacrificio de animales, debido a su reciente conformación.
No obstante, ya se han planteado con autoriaddes autoridades de Bacalar para contar con un punto de sacrificio común, a fin de acabar con los rastros clandestinos que se han formado en algunos hogares de la ciudad por parte de los tablajeros.
Por parte de las autoridades de Othón P. Blanco, existe plena disposición para acondicionar un rastro tipo TIF en la comunidad de Juan Sarabia, que también puede servir para el municipio de Bacalar, sin embargo, tiene que existir coordinación entre ambos municipios para concretarlo.
La Cofepris Reconoció que existe un control sanitario deficitario en el área rural, pues en comunidades pequeñas o alejadas de la ciudad es muy habitual el sacrificio de animales criados en traspatio, sin ningún tipo de control veterinario.