Redacción
Sistema de Justicia y Reformación Ingrato. Se podría decir que la Justicia del Hombre, es perfecta, pero sabemos que no lo es y al contrario, cuenta con vacíos legales o que algunas no estén bien formuladas, lo que ha causado que muchas veces se violenten los derechos y garantías individuales de los ciudadanos, ya que en la mayoría de las ocasiones los delitos que les imputan son alterados, montados y cuadrados por los judiciales, agentes ministeriales incluso agentes preventivos, que solo buscan resolver un delito sin importarle si el «detenido» es el verdadero culpable de los hechos constitutivos de delito. Solo les importa la estadística.
Lo antes dicho cae a plomo con lo que le sucedió con Daniel Ramos, quien fue acusado injustamente por agentes preventivos de la Policía Estatal y la Policía Judicial de haber cometido un delito que nunca cometió, tan solo por estar en el momento y lugar menos indicado, le apuntaron el dedo.
Afortunadamente, la resolución del Juez Segundo de lo Penal, favoreció a la absoluta libertad, absuelto de toda culpa, lo que desde un principio su abogado defensor había defendido con pruebas; del caso, no hubo pruebas en su contra.
Con la libertad absoluta, fue absuelto de toda culpa; con ello, se da un duro revés a las pruebas que aportaron los elementos preventivos que lo acusaron injustamente, para consignar al susodicho. Inocente, lo que en un principio se defendió; Sin embargo, si se condena que el agente ministerial en turno, buscó a toda costa culparlo y calificar un delito, cuando no lo existió, pues el ciudadano en mención, estaba en el momento y lugar menos indicado.
«Yo no soy distinto a ustedes, a mí me arrestaron dos “puercos” por caminar un rato y apuntaron el dedo, policías; mientras, yo a aquí callando, aguantando, ¿de qué me están juzgando?, ya no era llamado un ciudadano, ahora estaba arrestado y otro posible reo», que me metieran preso, mal lo veo; yo no les creo a su sistema de justicia y reformación ingrato, pero se olvidaron que Dios nos está mirando desde arriba, el único que Juzga y el que no discrimina”.
Tras días de proceso, el Juzgado Segundo de lo Penal, hizo justicia y resolvió el litigio, otorgándole la libertad absoluta, y absolviéndolo de toda culpa.
A pesar del lamentable acontecimiento, se puede detallar que la Procuraduría General de Justicia (PGJ) cumplió con los procedimientos que marca la Ley, investigar el caso que se denuncia. Lo que si se critica, es que agentes judicial, ministerial, incluso agentes preventivos, busquen a toda forma cuadrar un delito para procesar a los detenidos, como sucedió en este caso.
Afortunadamente, se hizo justicia, pues tras ser analizado el expediente en el Juzgado Segundo de lo Penal, salió a relucir la verdad, nuestro director, fue absuelto de toda culpa y liberado inmediatamente. No obstante, aquí, se violentaron los derechos y garantías individuales del comunicador, pues estuvo detenido injustamente, por lo que urgen reformas de leyes para acabar con estos casos que cada día son más comunes o se evidencian más.