Por Daniel Ramos
Chetumal, 16 de enero.- De acuerdo a las autoridades de salud, solo un 30 por ciento de las cerca de 2 mil sexoservidoras cuentan con tarjeta de salud en los municipios de Othón P. Blanco, Bacalar, José María Morelos y Felipe Carrillo Puerto. Se han expedido 500 tarjetas, no obstante la cifra real podría triplicarse, debido al clandestinaje que hay en todo el estado, lo que ha generado aumento en los casos de enfermedades venéreas.
A pesar que el sector Salud, ha creado programas para evitar las enfermedades venéreas, no obstante el clandestinaje y sexo-servicio en diferentes punto de la ciudad y que no están registradas, es uno de los factores que influye mucho en la transmisión enfermedades de origen sexual.
De acuerdo al sector Salud, actualmente se ha creado el Programa de Prevención y Atención de la Violencia familiar, donde por los factores que sufre una persona adulta o menor de edad sobre todo una violencia sexual, tiene el riesgo de contraer una infección de transmisión sexual y se le da la atención inmediata con tratamientos llamándoles de urgencia. Este programa tiene una intensa y discreta confiablidad de los casos con dependencias como es el DIF, PGR, Hospitales del sector Salud, C-4 y entre otras más relacionadas.
Por ello, con la finalidad de prevenir las infecciones de transmisión sexual y el VIH/SIDA, la jurisdicción sanitaria número 1 de la secretaria de salud ha entregado más de 354,780 preservativos a población abierta por medio del personal de los centros de salud del municipio de Othón P. Blanco y Bacalar; también menciona que el uso correcto del condón es una manera para la prevención de las enfermedades de transmisión sexual así como también la prevención de embarazos no deseados.
A pesar de que estos programas son gran ayuda para evitar que se incrementen considerablemente los casos de inmunodeficiencia en el estado, ahora, una de las problemáticas que hay, son los famosos “masajes Spa-Relax”, los cuales son comunes en anuncios de medios impresos, pues se sabe que en realidad se trata de sexo servidoras que a domicilio y/o en lugares específicos, las cuales no están registradas por el sector salud, por lo tanto no cuentan con tarjetas regulatorias.
Además el número de sexoservidoras en los mencionados municipios, es mucho mayor, pues hay que detallar que existen las casas de citas, el clandestinaje, entre otros puntos conocidos como “zona rosa”. Por lo cual el sector salud solo puede invitar a las mujeres a registrase para llevar un control de salud venéreo, pues actualmente sólo puede intervenir con acciones contra bares, cantinas y centros nocturnos, reconoce el sector salud.