Por José Jáimez /
Oneida Cuxin Irigoyen presidenta del Partido Revolucionario Institucional y regidora electa en el municipio de Bacalar, se voló la barda con la demanda interpuesta ante la Comisión Estatal de los Derechos Humanos (Cdheqroo) en contra del edil, José Alfredo Contreras Méndez.
La queja de la dirigente raya en lo absurdo, pues denuncia entre otras muchas cosas sin sustento al “Chepe” Contreras, de negarle dinero para apoyar las labores partidistas, es decir financiar con dinero del erario público su gestión al frente de tricolor bacalarense.
El documento fue recibido estos días en el palacio municipal en donde causó más de una carcajada, pues sin prueba alguna Oneida Cuxin asegura que Contreras Méndez, la ha exhibido públicamente como una “perra, zorra, y demás calificativos que ella misma asentó en la denuncia ante la Comisión Estatal de los Derechos Humanos. Pero lo más grave, reclama al edil la no entrega- que ella considera una obligación- de dinero para su gestión al frente del partido tricolor.
En esta ocasión- como en otras- a doña Oneida se le asesoró mal por sus lacayos ¿Cómo puede reclamar dinero del erario público para mantener un partido político? De haber sido entregado por José Alfredo Contreras Méndez, estaría cayendo en un delito grave, por desvíos de fondos públicos con fines partidistas.
Esta queja interpuesta por la dirigente del tricolor y regidora electa, solo exhibe la voracidad de esta dirigente y “representante” popular, y pone en alerta al alcalde electo, Alexander Zetina Aguiluz, de la clase persona con la que tendrá que lidiar dentro del cabildo que encabezará a finales del mes de septiembre.
Oneida Cuxin Irigoyen dice ser víctima del acoso físico y mental de muchos priistas que no coinciden con su forma de pensar. Mejor dicho con sus ambiciones de poseer lo que ella considera suyo, solo por el simple hecho de pertenecer al grupo del diputado federal, José Luis (chanito) Toledo.